La EPJA y su aporte para las interacciones humanas en contextos diversos
La diversidad y heterogeneidad de los sujetos de la EPJA y de sus contextos, así como la intrincada relación entre ambos, son hoy una característica insoslayable y componente fundamental de nuestra tarea educativa. Diversidad y heterogeneidad que no puede ser obviada ni vista como un obstáculo, sino por el contrario, como un elemento a valorar e incluir en nuestro desempeño docente, a partir de la especificidad de cada área o campo de conocimiento en el que desarrollemos nuestro trabajo cotidiano. Es a partir de los saberes que culturalmente han internalizado los jóvenes y adultos con que trabajamos, que podremos desplegar el proceso de enseñanza y de aprendizaje, para que logren un conocimiento crítico de su entorno y de otros temporal y espacialmente diferentes.
Esta valoración de la diversidad de sujetos y heterogeneidad de contextos, se convierte así en un pilar fundamental para promover una formación de sujetos capaces de aportar para la mejor calidad de vida tanto en lo personal como en su comunidad.
EPJA y Trabajo
La EPJA tiende a la formación integral de los sujetos y, por tanto, la vinculación con el mundo del trabajo constituye un eje ineludible de la misma.
Por su parte, la capacidad de reflexionar sobre los contextos (como señala el eje anterior) incluye no sólo los aspectos socioculturales sino también políticos y económicos para lograr una formación que no sea una mera preparación para un empleo sino una real formación para el trabajo.
Por ello en la formación integral que promueva la EPJA, se debe propender a un conocimiento amplio de los deberes y derechos como trabajadores/as, de las características actuales y prospectivas que definen al mundo del trabajo, las transformaciones en las formas de organización y las condiciones y relaciones laborales en el contexto actual y, en particular, en los sectores socio ocupacionales claves para los contextos en que se desarrolla.
La EPJA como fortalecimiento de la ciudadanía
La Ley Nacional de Educación establece en el Art. 3° que “La educación es una prioridad nacional y se constituye en política de Estado para construir una sociedad justa, reafirmar la soberanía e identidad nacional, profundizar el ejercicio de la ciudadanía democrática, respetar los derechos humanos y libertades fundamentales y fortalecer el desarrollo económico-social de la Nación”.
Este cometido de la educación en general, para la EPJA se convierte en un imperativo de particular trascendencia, ya que –en tanto modalidad- está convocada a promover en los sujetos con quienes trabaja, un ejercicio pleno y participativo de la vida ciudadana.
Tomando como punto de partida los contextos particulares y las condiciones específicas de la diversidad de sujetos aludidos en el 1º eje, como así también las distintas manifestaciones de la exclusión y vulnerabilidad en que puedan hallarse los sujetos de esta modalidad, y en concordancia con los ejes mencionados anteriormente, se torna imprescindible aportar un conocimiento de los deberes y derechos así como de los diversos niveles de organización y responsabilidades políticas para que puedan ejercer críticamente el accionar ciudadano que les posibilite superar situaciones de inequidad y de limitaciones a su participación ciudadana plena.
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